Nombre: Hyperion Calhoun.
Edad: 16 años. Nacido el nueve de Junio.
Ubicación: Campamento Mestizo – Seabrook Island, Carolina del Sur.
Estatus: Semidios griego, mortal.
Familia: Annie Calhoun (madre), Kalliope Calhoun (gemela), Apolo (padre), Cabaña siete (medios hermanos de parte de su padre).
Habilidades: Puede curar gente con tan sólo cantar un himno a su padre, en griego antiguo claro. Y es excelente con el arco y los deportes físicos. Y además de las habilidades que vienen en el paquete de "hijo de Apolo", Hyperion demostró ser uno de los pocos hijos del dios del Sol con la habilidad de Photokinesis, o sea, el control sobre la luz.
Biografía: Trece minutos tuvieron que pasar del nacimiento de Kalliope Calhoun para que al fin el pequeño Hyperion dejará escuchar sus llantos, los cuales dejaron en claro que un nuevo niño había llegado a este mundo, volviéndose así el segundo hijo de Annie Calhoun y Apolo, quien hasta ese entonces se hacía llamar Fred.
Hyperion, llamado como un gran titan, terminó siendo el hermano que iba tras Kalliope y temía separarse de ella. Tanto él, como su gemela, se criaron en Seabrook Island, un pequeño pueblo de Carolina del Sur, junto a su madre y ese dios, que años más tarde los terminaría abandonando.
La infancia de Hyperion fue ¡la mejor etapa de su vida! Y en verdad, la disfrutó mucho. Junto a su hermana iban a diferentes escuelas, (las cuales en verdad no fueron tantas ya que en el pueblo solo existían tres escuelas), ya que terminaban siempre o echándolos o diciéndole a Anna que aquellos niños no servían para estudiar y hasta una vez tuvieron que estar dos años estudiando en casa. Y quizás fue por todas aquellas razones que ese chico se volvió tan cerrado y sólo charlaba con su madre o su hermana. Hyperion no tenía la capacidad de interactuar con los demás, en verdad le costaba. Y la mayoría del tiempo en la que "se dedicaba a hablar con otros que no sean Kalliope" era para poner a prueba a la otra persona, pidiéndole que le diga diferencias entre ambos gemelos. Exacto, el chico era un maniático en molestar a los demás ya que terminaba poniendo nervioso a todos. Sus compañeros veían las diferencias externas pero no las internas y eso a veces le molestaba al joven Calhoun.
Con tan sólo siete años, aquel rubio vivió otro dolor. El hecho de que su hermana "creciera" hasta el punto de volverse una niña madura le dolió bastante, ya que las bromas se acabaron por un tiempo, ya no tenían ese momento de travesura donde los pequeños volvían loco a su vecino. Y con su madre, enfermándose poco a poco, las cosas no parecían estar cambiando para bien hasta que un día, con doce años y medio, tuvo que escapar de ese pueblo. Había algo dentro de él que podía huir y no era el hecho de que su vecino ya no parecía humano, si no que una bestia y eso lo asustaba, si no que también lo sentía correr por sus venas, una energía que lo llevaba a gritos internos hacia otro lugar. Y una tarde, Hyperion llegó junto a su gemela a la colina mestiza. Una grata sorpresa fue encontrar el Campamento donde, según Quirón, encontrarían personas que si entendieran lo "dura" que la vida de aquel chico. Pero... ¡¡Aún más grande fue la sorpresa cuando al joven Hyperion Calhoun se le apareció un arpa brillante y majestuosa por sobre la cabeza!! ¿Qué diablos hacía eso allí? Y si, esa era la forma de Apolo con la cual daba a indicar que ese semidiós era suyo. Su padre era un dios, y no cualquier dios, si no que ¡el dios del Sol! Vaya momento, la vida de Hyperion estaba cambiando. Aunque al chico no le agrado para nada el hecho de ser reconocido primero, ya que su hermana, y mejor amiga, estuvo distante hasta por fin ser reconocida. (Lo cual fue una tortura para él).
A pesar de ser tan unidos, los gemelos son parecidos pero no iguales. Y al comenzar su vida en el Campamento, lo demostraron aún más. Ambos lograron "hacer amigos" pero había algo que los diferenciaba demasiado a la hora de relacionarse y era que Hyperion aunque es muy sociable, demuestra una actitud infantil, insegura hasta impulsiva con respecto a relaciones nuevas. Y lo peor, se encariñaba demasiado rápido, cosa que según su hermana (y Killian, un hermanastro que conocieron al llegar) era un error fatal.
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